
Es costumbre no muy buena el comprar un bien raíz, las personas crean haber satisfecho la operación con el traslado de dominio que se realiza en la oficina catastral, lo cierto es que se trata solo de un primer paso, y es que antes de comprar y después de hacerlo se deben realizar una serie de actos que procuren una compraventa sana.
Al no escriturar, los derechos que una cesión debe crear permanecen inciertos, vagos o difusos; es más el propio artículo 186 del Código Financiero del Estado de México advierte: “la inscripción de un inmueble en le padrón catastral no genera por sí misma, ningún derecho de propiedad o posesión a favor de persona a cuyo nombre aparezca inscrito”
¿Quién no ha conocido el típico caso en donde un vendedor realiza una doble venta o aquel en donde de repente aparece otro dueño o quien se haga “dueño” por el trascurso del tiempo? Y es que aunque haya en cada uno de estos ejemplos circunstancias que les son muy propias, el común denominador que priva es: LA FALTA DE ESCRITURA PÚBLICA.
Este documento que se obtiene ya sea a través de la promoción judicial o gestión notarial respectiva, da certeza jurídica a la operación de compraventa y en un momento dado otorga derechos de preferencia frente a un titulo similar pero de registro posterior.
La escritura tiene otra ventaja, la financiera; pues para el acreditante significa otorgar un financiamiento en condiciones preferenciales a su acreditado, con la certeza de ver garantizado el pago. Una ventaja más, sino se tiene la necesidad de crédito pero no hay certeza de la buena marcha de la administración de mi patrimonio y quiero que este quede a salvo de gravámenes o embargos, escriturar es el primer paso para constituir “el patrimonio familiar”, el cual es inembargable.
En fin cada quien conoce su condición, si tiene dudas o desea una orientación visítenos, escriba o llámenos:
e-mail: abogadosdeempresa22@gmail.com
Tel 552843-8627

No hay comentarios:
Publicar un comentario